La era está pariendo

 

Oskar Kokoshka

Y no pareciera que fuera un corazón. Me empezaré a asomar a este raro y hostil mundo con precaución, da temor. Se nos acaba lo conocido y surge de las entrañas de la tierra un rugido de un monstruo que no se sabe cuantas cabezas tendrá. Por ahora asoman algunas con gran voracidad. Quieren devorar un mundo civilizado que con gran pasividad se está inmolando. Se nos acaba la comodidad de la indiferencia, ahora el mundo exige una definición entre dos polaridades. Se está con el mundo civilizado o se está con la barbarie. No hay cabida para los “como si” y la ambigüedad.

A Putin, que se erigió en emperador y pretende dominar a través de la violencia y el terror una parte de la bipolaridad en la que nos volvemos a encontrar, hay que combatirlo con las armas de las que disponemos. Las organizaciones del mundo civilizado deben ser más activas y confrontacionales. Deben activarse las sociedades civiles del mundo occidental y evitarse a toda costa estos gobiernos dictatoriales y delincuenciales que están minando a América toda. Ahora Estados Unidos se encuentra con una seria amenaza. Los que se quieren adueñar del mundo para imponer sus autocracias no están perdiendo el tiempo y sus ataques son certeros y muy dolorosos.

Lo que está pasando en Israel no está lejos de una repetición del Holocausto. Estamos nuevamente metidos en la peor pesadilla que ha vivido el mundo y estamos volteando para otra parte. Debíamos estar horrorizados porque por cada inocente ejecutado en manos de los bárbaros, estamos perdiendo pedazos de la ilusión por un mundo mejor. Se nos desmorona ante nuestra indolencia, un mundo dolorosamente construido. Volverá a reinar la justicia y la paz, pero después que hayan acabado con millones de familias que lo único que pedían era poder vivir en paz. Vuelve a aparecer el temible monstruo que creímos exterminado para siempre.

Tenemos, obligatoriamente, que definirnos y dejar la frivolidad el chisme tonto de listicas y otros divertimentos de escándalos inventados. El mundo está exigiendo seriedad. Desgraciadamente nuestro país se pondrá de lado de la barbarie, es por ello y con mayor razón que se debe pedir seriedad en el proceso electoral que debe iniciarse a finales de este año. Se acabaron las fiestas, que no fueron muy animadas con tantos problemas que enfrentamos. Se requiere seriedad, disciplina y amor por nuestra gente maltratada. Se requiere seriedad, disciplina y amor por todos los que sufren en Gaza y Ucrania. Se requiere seriedad, disciplina y amor por un mundo que estábamos construyendo y se nos cae a pedazos.

Asusta, porque no pareciera que nos espera un buen año, todo lo contrario, esperemos más horrores por venir. Estos mesiánicos vinieron con una función que cumplir y están siguiendo su guión. Me asomo con cierta timidez, sin dejar de ver lo que me espera. El mundo decidió copiarse de Venezuela, el proceso bárbaro que iniciamos hace 23 años se generalizó. Trump no está muy lejos de ser un Chávez. Y a Chávez le faltó la bomba atómica para ser un Putin.

Asusta un mundo perdido con enemigos tan poderosos.